Una tarde que andábamos paseando por las inmediaciones del Museo Guggenheim de Bilbao nos animamos a picar algo en el Restaurante Le Café del Domine Bilbao. Quizás fue una señal, ya que al pasar junto a Puppy vimos reflejada su silueta en la fachada acristalada del Gran Hotel Domine.

Gran Hotel Domine Bilbao
Cuando entramos por la puerta del hotel, reformado totalmente en el 2017, ya se apreciaba el espectacular “Ciprés fósil“, situado junto a una cascada de agua. También destacaba un curioso reloj “A million Times ” que cambiaba la hora de una forma muy original. Este hotel contaba con una gran oferta de restauración con el Restaurante Le Café, el Restaurante Beltz, el Sixty-One Lobby Bar y la Terraza, ubicada en la última planta con vistas al Museo Guggenheim y la Torre Iberdrola de Bilbao.



Sixty-One Lobby Bar
Antes de entrar al Restaurante Le Café nos llamó la atención la decoración tan vanguardista y acogedora del Sixty-One Lobby Bar. Por este motivo decidimos pasar a tomar algo antes de cenar y nos acercamos a la barra.



En el camino nos encontramos con una impresionante mesa de mármol, que destacaba en este espacio tan versátil, decorado con un mobiliario moderno, combinando los metales con las tapicerías de cuero.
Mientras tomábamos una copa de vino en la barra degustando unas palomitas caseras, comprobamos que había gente picando algo en plan informal. También había varias personas trabajando con su ordenador y otras tomando unos cócteles bien preparados. Esto último lo apuntamos para una próxima visita.
Restaurante Le Café del Domine Bilbao
Después cruzamos el pasillo y nos dirigimos al Restaurante Le Café del Domine para cenar. Nos sentamos en una mesa de cristal negro junto a la ventana, con la compañía de la figura de Puppy. El comedor era un espacio muy abierto con una decoración acorde con la nueva línea de este hotel, que ha creado estilo en Bilbao.



Menú y Picoteo con estilo y sabor
Enseguida un amable camarero nos trajo la carta, donde comprobamos que servían un menú al mediodía muy interesante (34€ de lunes a viernes / 38€ fin de semana). También disponían de varios platos para compartir en plan picoteo informal, que fue nuestra elección para esta noche.
Para maridar esta cena informal nos decantamos por dos vinos muy diferentes. Comenzamos con una copa de Finca Las Caraballas, un vino blanco verdejo ecológico, que sorprendía por su toque seco y delicado. Después continuamos con una copa de vino tinto crianza Campillo de la DOCa Rioja, para rememorar la visita que realizamos recientemente a esta gran bodega de Laguardia.
Platos reconocibles bien preparados
Comenzamos con un Salmón marinado en casa con una salsa tártara de mostaza violeta y bouquet de color (14€). Un pescado con una textura delicada y un buen sabor, acompañado del toque alegre de la salsa.



Seguimos con un sorprendente Hummus de aguacate con crudités de verduras y pan cristal (9€). Un gran descubrimiento.



Después degustamos unas deliciosas Croquetas caseras de jamón ibérico (10€), una especialidad clásica muy cremosa y con sabor.



Nuestra siguiente elección fueron unos esponjosos Buñuelos de bacalao con emulsión de piquillos (10€).



Finalizamos esta cena de picoteo con unos Chipirones en su tinta con cous cous de ajos tiernos (14€), donde predominaba el buen producto del mar bien cocinado.



Abel Corral, chef del Hotel Domine Bilbao
Antes de abandonar el Restaurante Le Café, Abel Corral, el chef del Hotel Domine BIlbao, se acerco a saludarnos y aprovechamos para inmortalizar este momento.



Restaurante gastronómico Beltz
Durante nuestra conversación con este cocinero vasco, que se ha curtido en las cocinas de Andoni Aduriz y Ferra Adriá entre otros, nos informó de que además del Restaurante Le Café, en el hotel disponían del Restaurante Beltz. En este espacio de alta gastronomía, Abel y su equipo elaboraban platos basados en los productos de temporada y en una cocina vasca con toques modernos.



Para saciar nuestra curiosidad nos acercamos al Restaurante Beltz, que solo ofrecía servicio de cenas. Allí descubrimos un espacio que destacaba por sus paredes de piedra en tonos oscuros que combinaban perfectamente con la mantelería y la cubertería blanca, creando un ambiente elegante, moderno y acogedor. Lo apuntamos para una próxima visita.



Resumiendo, en el Restaurante Le Café de Bilbao disfrutamos de unos platos bien preparados y con sabores reconocibles, en una cena de picoteo informal.



Además descubrimos el Sixty-One Lobby Bar, ideal para tomar algo y el Restaurante gastronómico Beltz. Solo nos faltó visitar su espectacular Terraza con vistas al Museo Guggenheim y a la Torre Iberdrola.



Restaurante Le Café
Dirección: Mazarredo Zumarkalea, 61, Bilbao