Durante la celebración del 4º aniversario de Eusko Travel Bloggers en Rioja Alavesa realizamos el Paseo del Matxinbrao, una ruta en Labastida / Bastida de unos 5 kilómetros, entre curiosas esculturas realizadas por un vecino de esta preciosa localidad de Araba.
Además redondeamos esta jornada en Labastida/Bastida recorriendo las calles de su Casco Histórico llenas de palacios y casas señoriales en cuyas fachadas destacaban sus escudos heráldicos. También visitamos dos bodegas de esta localidad de Rioja Alavesa y probamos la gastronomía local en sus bares y restaurantes.
Paseo del Matxinbrao en Labastida
En este sencilla ruta en Labastida del Paseo del Matxinbrao, además del paisaje natural, encontramos numerosas esculturas y obras artísticas realizadas en madera y sobre las rocas por Pedro Pablo, un vecino muy creativo de esta localidad alavesa.
Comenzamos el Paseo del Matxinbrao (una ruta circular de unos 5 km) desde el Arco de Larrazuria, una de las 3 antiguas entradas al Casco Histórico de Labastida.
De esta forma atravesamos la Calle Mayor flanqueados por palacios y casonas blasonadas, que formaban parte de la ruta de la exposición heráldica permanente de los 29 escudos de armas heráldicos que había en Labastida.
Cuando llegamos a la Plaza de la Paz encontramos a la derecha el edificio del actual Ayuntamiento de Labastida (s. XVIII).
Desde la plaza subimos a la izquierda por las escaleras a la sombra de la imponente Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de estilo renacentista y barroco (s. XVI-XVIII).
Ascendimos hacia la Plaza del Olmo y seguimos hasta el Arco de Toloño, donde tomamos el sendero del Paseo del Matxinbrao, que pasaba por el Área Recreativa de San Ginés, junto a la ermita del mismo nombre.
Viñedos a los pies del Toloño
Durante el Paseo del Mantxinbrao, una sencilla ruta en Labastida, caminamos entre las huertas y los viñedos a la sombra de la Sierra de Toloño.
Poco a poco íbamos ascendiendo y después de pasar junto al Área Recreativa de San Ginés, que era el punto de partida habitual para subir a la cima del pico de Toloño (1.277 metros), a uno 400 metros tomamos por un sendero arbolado, dejando de lado la señal hacia ROMA.
Esculturas y obras de arte originales
En este punto comenzaba la parte más atractiva del Paseo del Matxinbrao y había que estar muy atentos, ya que a ambos lados del sendero iban apareciendo las curiosas esculturas y obras de arte creadas por Pedro Pablo.
En primer lugar encontramos una especie de vitrina de cristal incrustada en la roca que mostraba la personal visión del artista de los 7 pecados capitales.
Luego nos saludó un payaso desde lo alto de una roca.
Durante el trayecto de unos 2 kilómetros vimos más de 20 creaciones de este artista local que le daban un plus a este paseo de Matxinbrao, que contaba con unas vistas privilegiadas. Por un lado hacia la Sierra de Toloño y por el otro lado hacia los pueblos y viñedos de la cuadrilla alavesa de Rioja Alavesa y de La Rioja.
Este artista creaba sus obras intentando activar la imaginación de los visitantes y en una de ellas seguimos los pasos blancos hacia un pequeño precipicio que nos invitaba a volar como si fuésemos el mismo Ícaro.
Luego nos topamos al borde del camino con una escultura de piedra y una roca tapizada con cuadraditos metálicos.
Ruta del arte en Labastida
Enseguida volvimos a detenernos para descubrir otra escultura que nos animó a observar el mundo por un agujero solar.
Luego encontramos un conjunto de piedras de colores muy llamativos con herramientas incrustadas, como abrelatas, sacacorchos, etc.
Después de pasar junto a una gran piedra decorada con canicas de colores llegamos a la obra ” La Suerte está echada“, una composición que reflejaba uno de los momentos más importante de la vida de este artista alavés.
Acueducto y canal de Labastida
Cuando llegamos a una especie de mirador pudimos ver los restos del antiguo canal y de uno de los dos acueductos que se conservaban en Labastida.
Muy cerca había otra original escultura metálica que se asomaba al paisaje de esta comarca.
Siguiendo el camino de esta ruta en Labastida iban apareciendo imágenes y dibujos geométricos en varias rocas, en forma de rombos, dientes de sierra o líneas entrecruzadas. También pudimos ver representado un original pez.
Mirador del Paseo del Matxinbrao
Luego nos paramos a contemplar una escultura tallada en piedra, una de las últimas obras del Paseo de Matxinbrao, que formaba parte del paisaje de esta ruta en Labastida con mucho arte.
Enseguida llegamos al Mirador del Paseo del Matxinbrao, donde nos asomamos a los campos de viñedos dominados por los pueblos riojanos de San Vicente de la Sonsierra y Briones, asentados en pequeñas colinas.
Desde aquí se podía bajar hasta la Ermita del Santo Cristo de Laguardia, pero nosotros tomamos un estrecho sendero a la izquierda que ascendía hasta una colina donde estuvo ubicado el castillo de Labastida.
En lo alto del cerro había un panel que mostraba las estrellas que se veían en el año 1242 y un Planisferio celeste o Buscador de estrellas para ayudar a encontrar de noche estos astros luminosos.
Luego descendimos por unas escaleras de tierra empinadas hasta la Ermita del Santo Cristo, situada sobre el Casco Histórico de Labastida.
Murallas medievales de Labastida
Desde allí comenzamos a descender por las calles del Casco Histórico y pasamos junto a la casa del creador de las esculturas del Paseo del Matxinbrao.
Además, muy cerca se encontraba el Lagar de la Mota, uno de los antiguos lagares que se conservaban de los muchos que hubo debajo de cada vivienda de Labastida, para elaborar vino.
También disfrutamos de una preciosa panorámica de la Iglesia de la Asunción.
Continuamos bajando hasta los dos miradores ubicados en lo alto de los restos de la muralla medieval de Labastida.
Desde allí se obtenía una vista privilegiada de las calles y las casas de Labastida / Bastida.
Después descendimos hasta la calle El Frontín y volvimos a observar la muralla medieval, donde también se apreciaban los restos de los nichos en las paredes o columbarios.
Nos acercamos hasta la Plaza de la Paz pasando junto a un gran mural que ocupaba la pared de una casa.
Pintxos y Restaurantes de Labastida
Cuando llegamos a la Plaza de la Paz nos sentamos en la terraza del Bar Martxoa y pedimos unos vinos y unos pintxos.
En este local de Labastida también preparaban unos cócteles muy originales.
Luego fuimos a comer a la Cervecería “La Cerve”, en la Avenida Diputación 8, donde probamos varias de sus especialidades a la brasa, como chuletas de cerdo, chorizo, morcilla y panceta.
Y rematamos con un delicioso pollo asado, bien preparado acompañándolo con un buen vino de Labastida.
Bodegas de Labastida
También tuvimos tiempo de visitar dos bodegas en Labastida:
- Bodega Aimarez, una bodega familiar gestionada actualmente por los hermanos Aitor e Iñaki que tomaron las riendas en 2014 para elaborar sus propios vinos.
Con ellos paseamos por sus viñedos y nos mostraron los lagares rupestres y las tumbas antropomorfas excavadas en la roca que se conservaban en Labastida. Y como no, visitamos las instalaciones de su bodega y probamos varios de sus vinos al calor de las brasas de sarmiento.
- Bodegas Tierra una de las más innovadoras de Rioja Alavesa. Durante la visita bajamos a sus calados (siglos XIV-XV), conocimos el proceso de elaboración de sus vinos y probamos 3 de sus referencias más representativas.
Una experiencia muy interesante en Labastida/Bastida durante la cual descubrimos el Paseo del Matxinbrao, una ruta plagada de esculturas, paseamos por el Casco Histórico y nos sumergimos en el mundo del vino visitando dos bodegas de esta localidad de Rioja Alavesa.