Cada vez que viajamos a Córdoba intentamos empaparnos de su cultura, su historia y de la riqueza de su gastronomía. En esta ocasión nos acercamos hasta el Restaurante Choco de Córdoba para degustar el Menú Barrio Antiguo (110€ sin bebidas) compuesto de 14 pases basados en los sabores cordobeses abiertos al mundo.
Restaurante Choco de Córdoba
En primer lugar hay que decir que el Restaurante Choco de Córdoba es un negocio familiar con más de 50 años de actividad. En la actualidad está regentado por los hermanos Kisko García en la cocina y Juan Carlos García en sala, que han conseguido la distinción de una estrella michelin y dos soles repsol.
Este espacio gastronómico estaba ubicado junto al restaurante familiar, que regentaron sus padres en el Barrio de Fuensanta, ahora en manos de sus hijos Juan Carlos y Kisko, que continúan atendiendo a la clientela habitual y ofreciendo una carta mas informal, en su amplia terraza.
Cuando llegamos al restaurante, antes de entrar, nos acomodamos en esa terraza del bar para tomar una caña de cerveza (2€) con su tapita de aceitunas.
Menú Barrio Antiguo del Choco de Córdoba
Luego pasamos a un hall muy elegante donde nos recibió Juan Carlos, que nos informó de los menús que servían, el Menú Kisko García (140€ /17 pases) y el Menú Barrio Antiguo (110€/ 14 pases), ambos precios sin bebida.
En esta ocasión nos decantamos por el Menú Barrio Antiguo (110€ sin bebidas) y nos preparamos para dejarnos llevar en este viaje gastronómico por Andalucía. Este menú del Choco de Córdoba estaba dividido en 4 apartados temáticos, Infancia, Entorno, Familia y Legado.
Infancia
En primer lugar sentados en el hall asistimos a las explicaciones de Juan Carlos García, que nos habló de los recuerdos de su Infancia en Villanueva de Córdoba y el Valle de Los Pedroches, impregnados de sal, vinagre y mantecas.
Luego nos dejó en la mesa un original árbol que daba sombra a la Chacina Antigua de cerdo ibérico de la raza Torbiscal y a un Bombón de pimientos asados.
Además completaba este primer cuadro gastronómico un vaso de vino de la tierra cordobesa.
Luego probamos las Papas con bacalao y el Cortadillo de perdiz escabechada emplatadas de una forma muy vistosa.
Infancia en la cocina
A continuación nos llevaron a la cocina para asistir a la elaboración y el emplatado de dos aperitivos más, de la mano del chef Ismael Luque.
Comenzó preparando un delicioso Buñuelo de esturión con un toque de brasa, comentando cada paso de la elaboración del plato.
Después preparó la Lechuga Aliñá, uno de los bocados clásicos del restaurante de los padres de Kisko y Juan Carlos, que mantenían en el nuevo espacio gastronómico.
Entorno
Luego pasamos al elegante comedor para entrar en el segundo apartado del menú denominado Entorno, donde los protagonistas eran el mar, el fuego y la tierra.
Para maridar estos bocados con alma andaluza nos decantamos por una botella de Cava Mestres Visol (45€) ligero y chispeante.
También nos dejaron en la mesa unos panes muy especiales que formaban parte de este menú repleto de guiños a los sabores cordobeses, a los guisos tradicionales y a los vinos de la tierra.
Ideales para untar una adictiva Mantequilla de cabra y un poco de AOVE de una pequeña finca cordobesa con mucha historia.
Después degustamos un exquisito Gazpachuelo frio y Quisquillas, cuyo sabor nos hizo escuchar el sonido de las olas que resonaron en nuestro paladar.
Continuando cerca del mar probamos la Cigala templada y morcilla, con la carne tersa y sabrosa sobre un tarta de morcilla, todo ello napado con una ligera crema.
Familia
Pasamos al tercer apartado de la comida dedicado a la Familia, donde nos sumergimos en el humo y el arraigo de la cocina de su abuela, maquillado con técnicas de alta cocina. De esta forma disfrutamos del sabor de la Presa ibérica yodada y con pimientos fritos.
También saboreamos el siguiente plato, el Choto con yogurt y anisados.
Legado
Finalmente entramos en la cuarta parte del menú Barrio Antiguo, el Legado, un dulce homenaje a la Historia, la Cultura y las Costumbres andaluzas, principalmente las cordobesas. Este viaje comenzó con el Homenaje a Medina Azahara, un té moruno muy especial.
Luego saboreamos un exquisito postre denominado Puerto y Puerta de Indias con un guiño a la historia de Sevilla y al descubrimiento de América.
Y para concluir este menú con aires andaluces vanguardistas nos dejaron en la mesa El Costurero, que escondía cuatro delicados petit fours que endulzaron la despedida.
Podemos decir que disfrutamos de un gran momento gastronómico en el Restaurante Choco de Córdoba, que es un auténtico referente de la cocina cordobesa puesta al día.
Dirección: C. Compositor Serrano Lucena, 14, Sureste, Córdoba
Teléfono: 957 26 48 63
Reservas: thefork.es
Cerrado lunes y martes y el mes de agosto