Durante nuestra estancia en la Ribeira Sacra descubrimos los secretos de sus vinos, navegamos por el río Sil y nos asomamos a sus espectaculares miradores. Además recorrimos sus increíbles paisajes y realizamos la interesante ruta de las Pasarelas del río Mao en la Ribeira Sacra, ascendiendo hasta San Lourenzo de Barxacova (7km/ ida y vuelta) para contemplar la desembocadura del río Mao en los cañones del río Sil.

Pasarelas del río Mao en la Ribeira Sacra
En primer lugar nos desplazamos en coche hasta el Concello de Parada de Sil en la provincia de Ourense y nos acercamos hasta el Albergue de la Fábrica de la Luz, que contaba con una cantina, una sala de exposiciones y un centro de actividades medioambientales y de turismo activo. Este edificio antiguamente fue una central hidroeléctrica.

Desde este punto, junto al río, partía la ruta que realizamos por las Pasarelas del río Mao hasta San Lourenzo (7km / unas dos horas). Hay que decir que la ruta estaba bien marcada y sólo había que seguir la señalización de rayas blancas y amarillas, que aparecían en los muros, paredes, árboles y postes.
Durante nuestro recorrido transitamos por un tramo de la Ruta circular del Cañón del río Mao (PR-G 177) de unos 16 kilómetros.

Pasarelas del río Mao
La primera parte del recorrido (1,8 kilómetros) transcurría por unas pasarelas de madera que atravesaban el cañón del río Mao, mimetizadas con el paisaje. Era la forma el más fácil para disfrutar de la belleza de este entorno natural, siguiendo el cauce del río Mao, encajonado entre paredes de roca. Nosotros la ampliamos un poco y ascendimos entre viñedos hasta la localidad de San Lourenzo, disfrutando de unas magníficas vistas de la desembocadura del río Mao en los cañones del río Sil.
Comenzamos a caminar por las pasarelas del río Mao acompañados por el sonido de las aguas de este río.

La ruta de las pasarelas también se llamaba “Circuito de Naturaleza de la Pasarela del río Mao” y contaba con paneles explicativos y juegos didácticos que hacían referencia a la flora, la fauna y la geología de este espacio natural.

Mientras paseábamos cómodamente por las pasarelas del río Mao, ancladas a la ladera del desfiladero, íbamos ganando altura asomados al cauce del río.

Mirador del cañón del río Mao
Más adelante se encontraba el Mirador del cañón del río Mao, enclavado en una zona privilegiada que permitía disfrutar de una maravillosas vistas.

En el mirador había un banco y un panel explicativo sobre las aves que sobrevolaban este desfiladero.

Desde allí nos asomamos al fondo del cañón por donde discurrían las aguas del río que atravesaban el desfiladero.

También, si se miraba hacia atrás, se distinguía la silueta del cañón del río Mao y la pasarela que habíamos atravesado.

Pasarelas con escaleras y rampas
Continuamos el recorrido por las Pasarelas del río Mao, subiendo y bajando por escaleras y rampas que salvaban la orografía irregular de la ladera del desfiladero.

El primer tramo de la ruta de las Pasarelas del río Mao en la Ribeira Sacra finalizaba bajando por unas escaleras empinadas que nos llevaron junto a un puente sobre el río Mao.

Pero no lo cruzamos y seguimos las indicaciones de la ruta tomando un sendero que transcurría pegado a la orilla izquierda del río.

Playa fluvial del Mao
A partir de aquí abandonamos las Pasarelas del río Mao en la Ribeira Sacra y continuamos por un este camino y a unos metros apareció un pequeño sendero a la derecha que descendía hasta la orilla misma del río. Como bajaba con poca agua continuamos por el lecho rocoso del Mao.

Enseguida nos encontramos con la Playa fluvial del Mao, donde había más cantidad de agua, que formaba parte del embalse de San Estevo. Como el nivel del pantano estaba bajo aparecían en la playa los restos de varias viviendas derruidas y en la ladera los muros de piedra de los antiguos bancales de los viñedos milenarios. Al fondo también se distinguían los cañones del río Sil, donde desembocaba el río Mao.

Barxacova
Después de disfrutar de esta bonita panorámica de la playa fluvial de Mao volvimos al sendero señalizado y continuamos por un camino pegados al curso del río.

Poco a poco fuimos ascendiendo en dirección a la pequeña aldea de Barxacova, caminando entre varios edificios derruidos.

Cuando llegamos a Barxacova, paseamos por sus estrechas calles, siguiendo las señales blancas y amarillas.

Al salir de Barxacova apareció un cruce que tomamos a la derecha para seguir en dirección a San Lourenzo de Barxacova (1,3 km). En este punto, tomando la desviación a la izquierda se podía volver a la Fábrica de la Luz (1,8km).

San Lourenzo de Barxacova
Nosotros comenzamos a ascender en dirección a San Lourenzo de Barxacova, rodeados de viñedos, castaños, manzanos y nogales, disfrutando de unas vistas privilegiadas de los cañones del río Sil.

Siguiendo las indicaciones blancas y amarillas salimos varias ocasiones a la carretera para luego continuar por estrechos senderos empinados.


Una de las veces lo hicimos junto a las Bodega o Adega Valcar, que bordeamos por un sendero hormigonado en dirección a San Lourenzo, situado a unos 750 metros.

Cañones del río Sil
Desde aquí se obtenía una espectacular panorámica del cañón del río Sil, surcado por varios barcos turísticos.

Además a la derecha se encontraba la desembocadura del río Mao, semiescondida por la ladera del monte.

Después caminamos entre varias casas con sus viñedos, contemplando de nuevo al fondo la bella estampa del río Sil.

Luego continuamos por un sendero empinado entre muros de piedra y árboles.

Desembocadura del río Mao
Las señales de la ruta nos sacaron a una curva de la carretera, donde había una escalera metálica para continuar el trayecto por un sendero.

Durante la subida a San Lourenzo de Barxacova disfrutamos de una bonita imagen de la desembocadura del río Mao en el cauce del río Sil.

Después salimos a la carretera para entrar en el coqueto pueblo de San Lourenzo,


Paseamos por sus calles hasta una fuente, donde nos refrescamos mirando al cañón del río Sil.

Muy cerca se encontraba la Necrópolis altomedieval de San Vitor, pero lo dejamos para otra ocasión y regresamos descendiendo por el mismo camino.


Mientras bajábamos rodeados de viñedos, castaños y nogales volvimos a contemplar la desembocadura del Mao en el río Sil.

En definitiva, la Ruta de las Pasarelas del río Mao en la Ribeira Sacra es un precioso y fácil recorrido por el cañón del río Mao. En nuestro caso lo endurecimos un poco ascendiendo hasta San Lourenzo de Barxacova para disfrutar del paisaje tapizado de viñedos y árboles asomados a los cañones del río Mao y del Sil.