Recorriendo la costa asturiana recalamos en la bella localidad de Llanes. Después de recorrer sus calles y disfrutar de sus playas nos dirigimos al Restaurante El Retiro de LLanes, con la intención de conocer de primera mano lo que se estaba cociendo en sus fogones.
El Retiro de Llanes
El Restaurante El Retiro de Llanes, situado en el Barrio Pancar, ocupaba las instalaciones de una antigua sidreria o chigre. Durante muchos años la familia de Ricardo González Sotres, el actual cocinero de El Retiro, ofreció allí a la clientela su comida casera. Este cocinero, después de formarse y pasar por varios restaurantes afamados, retornó a sus orígenes. En poco tiempo reformó y revolucionó la casa de comidas de su familia, consiguiendo una estrella michelin y dos soles repsol.
Como teníamos muchas ganas de probar sus atrevidas creaciones entramos en el edificio de piedra pegado a la carretera. Enseguida una camarera nos condujo a uno de los comedores. El local mantenía sus tradicionales paredes de piedra y contaba con una decoración muy cuidada, que daba el toque moderno.
Además había varios comedores comunicados y uno de ellos ocupaba el espacio de la antigua bodega.
Además, en una esquina del comedor había un Cheese corner, con varios tipos de quesos para poder ser degustados.
Menú Degustación
Después de repasar las opciones de la carta nos decidimos por el Menú Degustación (85€/persona). Además lo maridamos con una botella de Rimarts 24 ( 25€) un cava brut nature reserva DO Cava muy fresco y ligero. Pero antes nos trajeron como aperitivo una Copa de sidra envejecida en barrica. Curiosamente venía presentada a modo de un falso vermut y recordaba en su sabor a esta bebida. Actualmente ofrece el Menú San Patricio (110€/persona +servicio de pan y mantequilla 5€/persona)
Entrantes con sabor asturiano
Comenzamos con una Mantequilla casera de Pria, de elaboración propia con su punto de sal. Una especialidad adictiva acompañada de unas laminas de pan tostado muy crujientes.
Continuamos con un Cucurucho de queso, manzana y membrillo, una deliciosa y refrescante conjunción de productos autóctonos.
Seguidamente probamos una Rodaja de chorizo casero, que nos recordaba el sabor del producto hecho en casa. También degustamos una Croqueta suave de jamón, tostada por fuera y casi líquida por dentro, una delicia.
El siguiente entrante fue el Torto de maíz con pimientos asados y pulpo, un bocado delicado y muy asturiano.
Finalizamos los aperitivos con un Bloody Mary de almeja, con un sabor sorprendente.
Un buen inicio en el Restaurante El Retiro de LLanes, donde ya se percibía las dotes creativas del chef. Había que destacar en sus platos el equilibrio entre la tradición y la modernidad. Además, basándose en la cocina tradicional asturiana, mezclaba sin rubor sabores marinos, con carnes y productos de la huerta.
Sabor a mar
Continuamos con una Ostra especial con agua de manzana y granizado de apio. Una sabrosa ostra francesa de gran tamaño con una textura agradable. Además venía acompañada por una salsa líquida de manzana y un sorprendente granizado de apio.
Seguimos con los productos del mar y degustamos unas Almejas en escabeche de perdiz, algas y brotes marinos. Resulto ser un plato muy delicado construido con los sabores del mar y de la tierra.
Llego el momento de recordar que estábamos en otoño. Para ello probamos el Consomé de boletus con calamar y cebolleta, que estaba delicioso.
Combinaciones sorprendentes
El cocinero siguió mixeando en sus platos sobre la base de los productos asturianos y nos presento su Guiso de oreja astur-celta con carabinero en dos servicios.
En primer lugar tomamos el cuerpo del marisco sobre el guiso basado en la oreja del cerdo. Comprobamos que conjugaba perfectamente la contundencia de la carne con la suavidad del carabinero.
Luego probamos el interior de la cabeza del carabinero y disfrutamos de toda la intensidad del mar.
Las especialidades que salían de la cocina del Restaurante El Retiro de LLanes iban ganando en atrevimiento. Un claro ejemplo fue el Foie-gras asado con lentejas, anguila ahumada y ajo negro. En este plato, la lámina de foie asada flotaba sobre una riquísima crema de lentejas. Además iba coronada por varios trozos de anguila y de ajo negro.
Volvimos a los sabores del mar y degustamos una Ostra caliente con guiso de callos de bacalao al curry. La delicadeza de la ostra templada se complementaba con el gusto muy marcado de los callos de bacalao al curry. Además, el punto crujiente lo ponía la piel del pescado frita a modo de corteza crujiente.
En este momento de la comida decidimos maridar los siguientes platos con vino tinto. Para ello pedimos una copa de Petit Pittacum 2015 (3,50€/copa) un vino tinto joven de uva mencia de la DO Bierzo.
Carnes de caza
Como estábamos en temporada de caza, el cocinero nos propuso dos especialidades impregnadas de su arte culinario. Comenzamos con una Pierna de cierva adobada en salazón de anchoas y algas, carne en su punto con un toque marino.
A continuación probamos la Codorniz asada con ravioli de caza, kalamata y apionabo. La carne de la codorniz estaba muy jugosa y bien cocinada. Destacaba el intenso sabor del relleno del ravioli y el toque de la aceituna griega y el apionabo.
Postres
Posteriormente comenzó el paseo dulce con una Crema de manzanas asadas, manzana ácida y helado de yogurt.
Finalizamos con un Esponja de chocolate y café, una delicia que mantenía el equilibrio entre varias texturas.
Para rematar la velada tomamos un Café sólo con un aroma y un gusto excepcional. Además vino escoltado por unos Petit Fours en forma de trufas, bizcocho y hojaldre.
El Menú Degustación elaborado por el equipo de Ricardo González Sotres fue un desfile de platos bien presentados y con un sabor sorprendente. Además ponían en valor los productos asturianos de temporada manejados con la maestría y el atrevimiento del chef del Restaurante El Retiro de Llanes.
Restaurante El Retiro
Dirección: Barrio El Pancar, Llanes
Teléfono: 985 40 02 40
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