Durante nuestra visita a la comarca de la Subbética Cordobesa recorrimos sus bellos parajes naturales y sus pueblos blancos llenos de historia. Entre otros visitamos la bella ciudad de Priego y la localidad serrana de Zuheros. Además, una de las jornadas la dedicamos a descubrir qué ver en Almedinilla de Córdoba y donde comer.

Qué ver en Almedinilla de Córdoba y donde comer
En primer lugar nos dirigimos al Centro de Recepción de Visitantes de Almedinilla para realizar una visita guiada (8,50€) por la Villa romana “El Ruedo”, el Poblado ibero “Cerro de la Cruz” y el Museo Histórico-Arqueológico de Fuente Ribera. Después realizamos una sencilla ruta hasta la Cascada del Salto del caballo y nos refrescamos en las pozas del Salto de “El Zurreón”. También recorrimos las calles de esta localidad de la Subbética Cordobesa y disfrutamos de la gastronomía local en los restaurantes de Almedinilla.
Museo Histórico-Arqueológico
Comenzamos la visita guiada en el Museo Histórico Árqueológico, ubicado en un antiguo molino de Fuente Ribera, junto al río Caicena. En el arco de la calle Los Molinos nos esperaba Emilio para guiarnos por esta tierra de sueños, qué bajo los olivos escondía una parte importante de su historia.
Cultura del aceite
La planta baja del museo estaba dedicada a la cultura del olivar y se mostraba la maquinaria de la antigua almazara y varios utensilios con más de 2.000 años. También había una muestra del impacto del monocultivo del olivar en el medio ambiente.
Además había expuestas varias semillas milenarias de los acebuches, el antepasado de los actuales olivos.
Poblado ibero
Después subimos a la primera planta dedicada al Poblado Ibero del “Cerro de la Cruz”, donde había restos originales de los utensilios usados por los antiguos pobladores iberos. Entre otras cosas encontramos piezas de cerámica, telares, armas como la falcata ibera y varios ornamentos funerarios.


Villa romana
La segunda planta estaba dedicada a la Villa Romana “El Ruedo” construida en Almedinilla, cuando los romanos arrasaron el asentamiento ibero. Pudimos ver un sepulcro con restos humanos de la época y una gran cantidad de sortijas y collares romanos.


También pudimos ver varias esculturas romanas entre las que se encontraba la de Hypnos o Somnus, el dios grecorromano del sueño.
Poblado ibero del “Cerro de la Cruz”
Después de visitar el museo nos dirigimos en coche a las afueras del pueblo, donde se encontraban los restos del Poblado ibero del “Cerro de la Cruz” (siglo III-II a.C)
En primer lugar vimos una recreación del interior de las viviendas iberas y de un horno de la época.


Después nos acercamos hasta las excavaciones del yacimiento del poblado ibero, donde Emilio nos habló sobre las costumbres y hábitos de estos moradores.
La vivienda ibera solía ser una casa adosada de dos alturas y disponía de un molino, una cisterna y un silo excavados en el suelo.
Además había varios talleres y almacenes para guardar en grandes ánforas los cereales, las legumbres, el vino y el aceite que elaboraban.
Hay que destacar que esta visita al poblado ibero del Cerro de la Cruz fue muy interesante.
Villa Romana “El Ruedo”
Desde aquí cogimos el coche y nos dirigimos de nuevo al Centro de Recepción de Visitantes de Almedinilla. Allí mismo se encontraba la Villa Romana “El Ruedo”, una domus residencial (siglos I al VII d. C,) que conservaba su estructura casi al completo.
Destacaban los muros con sus pinturas, los mosaicos del suelo y el original comedor o triclinium con agua.
En primer lugar vimos una maqueta de la villa, un pequeño cementerio y un impresionante horno romano.
Luego descubrimos el sistema de calefacción subterráneo de la época romana, muy similar a las glorias de la actualidad.
Mosaicos y pinturas romanas
Disfrutamos contemplando las vistosas pinturas de las paredes, que ya se construían con cámara de aire.
Alguno mosaicos de los suelos se conservaban bastante completos, con dibujos de figuras geométricas y florales.

Comedor o triclinium
Continuando la visita caminamos por una pasarela metálica y llegamos hasta la fuente central. Antiguamente, el agua se traía desde un manantial cercano y llegaba a esta ciudad romana encauzada por unas tuberías de plomo.
Destacaba el comedor o triclinium que al parecer se construyó inspirándose en la morada del Sueño descrita por Ovidio en uno de los poemas de su obra “La Metamorfosis”. El triclinium contaba con una cascada frente a la mesa del comedor donde comían reclinados los señores de la domus.
Además en lo alto de la cascada, presidiendo la sala del comedor o triclinium, al parecer estaba colocada la escultura del Dios del sueño Hypsos o Somnus, que ya vimos en el Museo Histórico Árqueológico. Durante unos momentos nos sentimos como unos invitados privilegiados en esta domus romana.
Centro de recepción de visitantes
Después volvimos al Centro de recepción de visitantes, donde visitamos una exposición interactiva de unas réplicas de varios instrumentos musicales romanos. Además solían ser utilizados por el grupo Skolion durante el Festum o jornadas iberromanas de Almedinilla. Finalizamos la visita disfrutando de una interesante proyección audiovisual en 3D sobre la villa romana.
AOVE de las Sierras Subbéticas
Además en el Centro de recepción de visitantes se podía adquirir aceite de oliva virgen extra OliBrácana de la Cooperativa de Almedinilla, elaborado con la variedad de aceituna picuda o picudo, bajo la DOP Priego de Córdoba.

Festum o Jornadas Iberorromanas
Durante una de nuestras visitas veraniegas a Almedinilla tuvimos la ocasión de presenciar algunas representaciones de las XIV Jornadas iberorromanas o Festum.
Concretamente los Diálogos: “La Plaga y el castigo de Dios” (3€) celebrados el 14 de agosto de 2021 en la Villa Romana.

También disfrutamos de la Charla-Recreación: “Brujas: Magia, medicina y maldiciones en el paganismo tardío” en las inmediaciones del Museo Histórico de Almedinilla.

Paseo por Almedinilla
Después nos dirigimos hacia el centro de Almedinilla en coche y pasamos junto al Coliseo, un espacio multiusos para eventos lúdicos y culturales, cuyo edificio se asemejaba a los coliseos romanos.
Luego recorrimos las calles de este pueblo blanco de la Subbética Cordobesa pasando por la Torre del Reloj construida en los años veinte del siglo pasado como la entrada al antiguo mercado de abastos.

Actualmente es la entrada a la Plaza del Ayuntamiento de Almedinilla, donde se encuentra una estatua realizada por el escultor J.M. Belmonte Cortés en homenaje al ex-alcalde Antonio Pulido.


Mina de agua “El Melero”
Luego nos acercamos hasta la Mina de agua “El Melero”, una galería de 30 metros de longitud excavada en los tiempos de los romanos para captar agua del interior de la roca de travertino del Cerro de Las Llanás.
Posteriormente esta cueva fue agrandada y se utilizó como refugio antiaéreo durante la Guerra Civil.
Fuente del León
Muy cerca se encontraba la Fuente del León inaugurada en los años treinta del siglo pasado por Niceto Alcala Zamora, el que fue Presidente de la II República Española. Por este motivo se la conoció popularmente como la Fuente de la República.

Cascada y poza de “El Zurreón”
Continuamos el paseo hasta el Paraje del Parque de San Juan, donde estaba la Cascada “El Zurreón” formada por las aguas del río Caicena, que se precipitaba verticalmente sobre una poza.
Aprovechamos la ocasión para darnos un baño en la poza contemplando el salto de agua.
Ruta de la Cascada del Salto del Caballo
También realizamos una ruta de senderismo hasta la Cascada del Salto del Caballo, un paseo señalizado de 3 km (ida y vuelta), partiendo desde el Museo Histórico Árqueológico de Fuente Ribera.
Después continuamos por una vereda que se conservaba de la época romana, internándonos en el Valle del río Caicena, paseando entre olivos, encinas, quejigos y arbustos hasta llegar al Salto del Caballo, que se precipitaba por la pared rocosa hasta una poza de aguas transparentes.
Cuando regresamos de la cascada por el mismo camino, al llegar a la la carretera, caminamos unos metros a la izquierda por la Ronda de Andalucía para acceder al sendero del Tajo de las Llanás. Durante el trayecto pasamos junto a una impresionante formación de roca de travertino, con multitud de cavidades para aves y alguna cueva prehistórica como la Cueva de los Barriguches.
De esta forma caminando junto al río Caicena llegamos a las ruinas del Molino del cura y a la Fuente del Piojo, un manantial de que brotaba de una antigua mina de agua de origen romano.


Donde comer en Almedinilla
Después de disfrutar de los encantos naturales, culturales y arquitectónicos de Almedinilla nos dispusimos a probar la gastronomía local.

Los Cabañas
En primer lugar probamos los platos serranos del Restaurante Los Cabañas, en la Ronda de Andalucía nº 52 de Almedinilla. Cuando entramos al local nos acercamos a la barra y pedimos una copa de vino blanco en rama Montilla-Moriles (1,30€) acompañado de una tapa de patatas guisadas con tomate. Después pasamos al comedor, que estaba decorado con motivos de caza y utensilios de labranza.


Comenzamos con un Revuelto de Collejas del Terreno (10€), una especie de espinacas silvestres que se cogían por esta zona.
Continuamos con el Remojón de Naranja (8€), una ensalada con naranja, huevo cocido, bacalao desmigado, aceite de oliva, pan de higos y atún. Un plato tradicional que preparaban los agricultores cuando almorzaban en el campo.
También degustamos un Rabo de Toro (12€) bien cocinado y con una textura delicada.
Para finalizar, como tenían instalada en la terraza una barbacoa, pedimos Presa ibérica a la brasa (16€) con su guarnición de patatas y calabacín.

Además, como en el bar había un espacio donde vendían productos de esta comarca cordobesa, compramos un delicioso Queso de cabra semicurado de Sierra de Zuheros de 350 gramos (5€).
La Bodega
También comimos en otra ocasión en el Restaurante La Bodega, situado en la Plaza de España 6 de Almedinilla. Sentados en su terraza exterior pedimos una caña de cerveza (1,30€) con una tapa de aceitunas y salmón ahumado.

Luego nos decantamos por el Menú del día (10€/persona) y degustamos un Salmorejo y unos Filetes de lomo con patatas.


Para terminar podemos decir que disfrutamos durante nuestra visita a esta localidad de la Subbética Cordobesa y descubrimos algunas cosas interesantes qué ver en Almedinilla de Córdoba y donde comer en este pueblo que cuidaba de su historia, su cultura y su gastronomía.