Durante nuestra estancia en el Algarve, al sur de Portugal, dimos un largo paseo por la costa de unos 15 kilómetros (4 horas/ida y vuelta) recorriendo el Humedal de Salgados y varias playas. Concretamente realizamos una ruta desde Praia Grande en el Algarve de Pêra hasta Praia Sao Rafael, cerca de Albufeira.
De esta forma pudimos disfrutar del paisaje natural del Algarve, a orillas del Atlántico y realizamos una parada gastronómica en el Restaurante Evaristo, ubicado en la playa del mismo nombre.
Ruta desde Praia Grande en el Algarve
En primer lugar partimos de la zona dunar de Praia Grande de Pêra y cruzamos el Humedal de Salgados. Después atravesamos Praia Galé, Praia Manuel Lourenço, Praia do Evaristo, Praia do Castelo y Praia Coelha. Finalmente nos acercamos hasta la espectacular Praia Sao Rafael.
Además, en Praia Evaristo hicimos una parada gastronómica en el Restaurante Evaristo, especializado en pescados a la brasa.
Praia Grande de Pêra
En primer lugar, salimos de Albufeira en coche en dirección hacia el enclave turístico de Armação de Pêra. Antes de llegar, apareció una señal a la izquierda, que nos llevó hasta el aparcamiento de tierra de Praia Grande de Pêra.
Humedal dos Salgados
Desde el aparcamiento se divisaba el Lago de Salgados o Lagoa dos Salgados, un humedal donde recalaban numerosas aves migratorias.
Nos acercamos caminando hasta un espacio habilitado como un observatorio de aves.
Desde allí se podían avistar patos, garzas, gaviotas y algunos flamencos, entre otras aves.
Después accedimos a una pasarela de madera, que discurría entre las dunas de Praia Grande y el humedal de Salgados.
Praia dos Salgados
Pasamos junto a otro observatorio de aves junto al lago y enseguida llegamos hasta la extensa Praia dos Salgados. Aunque se podía seguir caminando por la playa, optamos por hacerlo sobre una pasarela de madera. De esta forma cruzamos sobre las dunas protegidas hasta Praia Galé.
Praia Galé
Cuando finalizó la pasarela en Praia Galé, cruzamos esta playa paseando junto al Atlántico. Durante el trayecto por este largo arenal contemplamos varios arcos y otras curiosas figuras de roca caliza.
Al final de la playa había unas enormes rocas en la playa sobre las que se asentaban varios chiringuitos con terrazas de hamacas.
Calas muy coquetas
Después salimos de la playa y tomamos un sendero, que iba serpenteando y tomando altura entre las rocas, bordeando varias calas de arena.
Figuras en la roca
Además, las rocas erosionadas por el agua y el viento formaban figuras caprichosas que contribuían a resaltar la belleza del paisaje.
Praia Manuel Lourenço
Pronto Llegamos a un aparcamiento de tierra, donde comenzaba la zona de Praia Manuel Lourenço.
Después continuamos sobre unas formaciones rocosas con agujeros en el suelo que dejaban pasar el agua del mar.
Caprichos de la naturaleza
Durante el recorrido seguíamos disfrutando de las formaciones caprichosas de la roca caliza.
Tras pasar por varias calas, llegamos al arenal principal de Praia Manuel Lourenço. Hay que decir que era una bonita playa con pequeñas rocas entre la arena tostada.
Luego tomamos de nuevo el sendero y pasamos por unas plataformas rocosas junto al agua.
Después seguimos el camino, que ascendía levemente, para bordear el acantilado de tierra y roca.
Durante el paseo disfrutamos de la belleza de varias calas de arena y de piedras de aspecto salvaje.
También alternamos con tramos de suelo rocoso y nos encontramos con alguna cueva natural.
Posteriormente continuamos por los acantilados hasta perder de vista las calas de Praia Manuel Lourenço.
Praia do Evaristo
Este camino nos llevo hasta unas plataformas rocosas que desembocaban en la pequeña y coqueta Praia do Evaristo. En lo alto de la playa se encontraba el Restaurante Evaristo, donde hicimos una parada para comer.
Restaurante Evaristo
En primer lugar nos acercamos al moderno edifico acristalado de este restaurante especializado en pescados a la brasa. Allí disfrutamos de una grata experiencia gastronómica para tomar fuerzas y continuar nuestra ruta por el Algarve desde Praia Grande.
Cuando entramos elegimos la pieza de pescado que queríamos degustar y nos sentamos en la terraza exterior. Después compartimos un Sargo de 0.645 kg (37,41€) asado a la brasa que estaba exquisito.
Praia do Castelo
Después continuamos nuestro recorrido por el camino que seguía bordeando la costa y llegamos a Praia do Castelo, un amplio arenal rodeado de acantilados.
Praia Coelha
Atravesamos esta esplendida playa y continuamos la marcha caminando por los acantilados hasta llegar a la pequeña y curiosa Praia Coelha. Un rincón muy acogedor escondido entre las paredes de los acantilados.
Praia São Rafael
Desde aquí, como íbamos bien de fuerzas, nos animamos a continuar esta ruta que seguía por los acantilados de la costa del Algarve.
Durante el trayecto contemplamos bellas figuras en las rocas y descubrimos pequeñas calas escondidas.
Finalmente llegamos hasta Praia São Rafael, una playa de arena fina rodeada de rocas. Además sobre la arena había varias formaciones de roca caliza como el “Puente de la Pequeña” o el “Nido de Golondrina”.
Bajamos hasta el arenal y nos dejamos atrapar por la belleza de esta playa cercana a Albufeira.
Playa paradisiaca con cuevas y arcos
Caminamos por la fina arena y encontramos varias cuevas y arcos de piedra que aumentaban el atractivo de esta playa.
Una vez completado el camino de ida de esta larga ruta por el Algarve desde Praia Grande de Pêra, solo quedaba regresar por el mismo camino.
Una jornada completa para pasar un día caminando por los acantilados y las playas de esta bella comarca del sur de Portugal. Además de disfrutar del paisaje natural, también degustamos la gastronomía portuguesa.