Durante nuestra visita al Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas descubrimos qué ver en Cazorla y donde comer en esta encantadora localidad de Jaén. Para ello pasamos unos días en Cazorla, ubicada en las laderas del final de la vaguada del río Cerezuelo, rodeada de paisajes de ensueño y de extensos olivares que producían un AOVE de gran calidad. También contaba con un cuidado casco histórico que recordaba su glorioso pasado, al estar adscrita en el siglo XIII al Adelantamiento de Cazorla, dependiente del Arzobispado de Toledo.
Qué ver en Cazorla y donde comer
Durante varios días paseamos por las calles de Cazorla visitando el Castillo de la Yedra, las ruinas de Santa María, la Bóveda del río Cerezuelo, la Casa de la luz, el Molino y el Museo Frondosa Naturaleza. También realizamos varias rutas de senderismo, como la Senda del río Cerezuelo hasta la Cascada de la Malena. Y como no, nos fuimos de tapas por sus bares y degustamos algunos deliciosos platos en varios restaurantes de Cazorla.
Vistas de Cazorla
En primer lugar nos alojamos en un apartamento del Hotel Villa Turística de Cazorla, situado cerca del casco histórico.
Desde allí mismo disfrutamos de unas vistas privilegiadas de Cazorla, donde destacaban los edificios de varias iglesias y ermitas.
También se apreciaba la imagen del Castillo de la Yedra y de la muralla situado en la ladera de un cerro.
Además entre las rocas de la montaña situada sobre el hotel se distinguía la silueta de un camello de piedra.
Plaza de Santa María
Comenzamos nuestra visita a Cazorla dirigiéndonos desde el hotel caminando hacia el casco histórico de Cazorla para descubrir los encantos de esta localidad de Jaén. Y si se prefiere, también existe la posibilidad de contratar una visita guiada por Cazorla acompañados de un guía local.
De esta forma llegamos hasta la Plaza de Santa María, donde estaba la Fuente de las Cadenas de Cazorla, de estilo renacentista construida en 1605.
Además en la otra parte de la plaza se apreciaba un pilón con varios caños que recogían el agua de los arroyos de la montaña para conduciarla al interior de la bóveda subterránea del río.
Ruinas de Santa María y Bóveda del río Cerezuelo
En la Plaza de Santa María destacaban las ruinas de la Iglesia de Santa María, construida en el siglo XVI sobre el río Cerezuelo, el cual se soterró bajo una impresionante bóveda subterránea. Para descubrir los secretos de esta curiosa construcción realizamos una visita guiada (2€/persona) a la iglesia y a la bóveda subterránea.
Este templo promovido por el Arzobispado de Toledo no se terminó nunca y después de la enorme riada del año 1694, se abandonó el proyecto de la iglesia. Actualmente en este recinto se realizan actividades culturales y se puede visitar.
Después de la visita a las ruinas, atravesamos la Plaza de Santa María y accedimos por la parte inferior de la Bóveda subterránea del río Cerezuelo, acompañados de la guía.
Atravesamos el túnel abovedado subiendo por el cauce del río y salimos al exterior a la altura del puente que accedía al Centro de visitantes de la Casa de la Luz, nuestro siguiente destino.
La Casa de la Luz, Museo Frondosa Naturaleza y Molino
Siguiendo con las actividades de este día en Cazorla, entramos en el edificio de la Casa de la Luz, que en otros tiempos había sido una Central Hidroeléctrica. Junto a ella había un Molino Harinero. Ambas instalaciones habían utilizado las aguas del río para producir electricidad y mover las ruedas del molino.
Realizamos una visita guiada (2€/persona) durante la cual recorrimos el Museo Frondosa Naturaleza donde nos mostraron las singularidades de la fauna, la flora y la historia del Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. Pudimos ver fotografías, maquetas, restos fósiles, réplicas de aves, como el buitre leonado y el quebrantahuesos y cornamentas de varios cérvidos.
Después entramos en el Molino Harinero, donde vimos la vieja maquinaria del molino y visitamos la vivienda del maestro harinero, descubriendo algunas costumbres de épocas pasadas.
Castillo de la Yedra
Posteriormente ascendimos caminando en dirección al Castillo de la Yedra, situado en la parte inferior del Cerro de Salvatierra, que dominaba Cazorla.
Este castillo defensivo rodeado de una muralla bien conservada se comenzó a construir sobre una antigua fortaleza romana por los musulmanes y posteriormente fue reformado por los cristianos ( s. XIV). Se podía visitar de forma gratuita de martes a domingo acompañados de una guía.
Durante la visita se subía a las tres plantas de la Torre del Homenaje donde se conservaban tapices flamencos, varios bargueños o secreteres y armaduras. Incluso existía la leyenda de la Tragantía asociada al castillo.
Y asomados a las ventanas de la torre Desde sus ventanas disfrutamos de unas excelentes vistas de Cazorla y sus alrededores.
Además en un edificio anexo estaba ubicado el Museo de Artes y Costumbres Populares “Alto Guadalquivir”, donde vimos varias maquetas de viviendas tradicionales, una típica cocina cazorleña, cerámica y utensilios de labranza de esta comarca andaluza.
Desde el Castillo de la Yedra partían varias sendas para acceder caminando al Castillo de las Cinco Esquinas (1 km) a la Cascada de la Malena (2,4 km) y a la Ermita de San Isicio (1 km).
Barbacana del Castillo de la Yedra
Cuando bajamos hacia el casco histórico de Cazorla nos desviamos a la izquierda para internarnos en la barbacana, una muralla baja que rodeaba la muralla principal del castillo.
Paseamos rodeando el cerro del castillo y bajamos por la Calle del Castillo de este antiguo barrio, que nos llevó hasta la Plaza de Santa María de Cazorla.
Rutas desde Cazorla
También realizamos varias rutas desde Cazorla para disfrutar de los paisajes naturales que rodeaban esta preciosa localidad situada en el Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, uno de los más grandes de Europa. En primer lugar hicimos una ruta circular por la Senda del Río Cerezuelo hasta la Cascada de la Malena, una excursión no demasiado exigente de unas dos horas y media.
Durante la travesía se disfrutaba de unas maravillosas vistas del Castillo de la Yedra y su muralla, del pueblo de Cazorla y de los extensos campos de olivos.
También dedicamos un día para embarcarnos en una ruta en coche por los alrededores de Cazorla asomándonos a varios miradores espectaculares, visitando el nacimiento del río Guadalquivir y paseando por cortados rocosos en busca de preciosas cascadas entre buitres. Y durante el trayecto disfrutamos de la sencilla y atractiva ruta de senderismo de la Cerrada del Utrero.
Donde comer en Cazorla
Y ahora llega el momento de degustar la gastronomía local y descubrir donde comer en Cazorla.
Tapas en Cazorla
En primer lugar probamos algunas de las tapas que servían gratis con cada consumición en los bares de Cazorla. Partimos de la Plaza de Santa María y tomamos por la estrecha calle Jose Salcedo Cano. De esta forma llegamos a la Plaza Balcón Pintor Zabaleta, desde donde había una bonita vista nocturna del Castillo de la Yedra.
Bar La Cantina
Continuamos hasta la Plaza de la Corredera y nos sentamos en la terraza del Bar La Cantina donde tomamos una cerveza con una Tapa de longaniza con almendras.
Bar La Montería
También en la Plaza de la Corredera probamos una Tapa de carne de cerdo frita en el Bar La Montería, una bodeguilla tradicional.
Bar Rojas
Continuamos hasta la Plaza de la Constitución y entramos en el Bar Rojas, especializado en quesos y embutidos, donde nos sirvieron una Tapa de queso manchego.
Mesón La Toba
También nos acercamos hasta el Mesón La Toba, ubicado en el Paseo Santo Cristo junto a un bonito parque, donde probamos una Tapa de bolitas de pollo frito.
Mesón Leandro
Ahora vamos a hablar de varios restaurantes de Cazorla y comenzaremos por el interesante Mesón Leandro, situado en la Calle Hoz, 3, muy cerca de la Plaza de Santa María. El local disponía de un comedor muy acogedor y un servicio de sala cercano y profesional.
En primer lugar pedimos un delicado Bouquet de salmón, bacalao ahumado y anchoas (13€) y un Rin-ran (9€), una especialidad típica de esta localidad.
También probamos un exquisito Carpaccio de buey (12€) con queso parmesano.
Como estaba especializado en carnes preparadas a la brasa de carbón pedimos una Chuleta de ternera (26€/750 gramos) y una Presa ibérica (15€), ambas preparadas al punto y con un sabor espectacular.
Mesón Leandro
Lusco Taberna
En otra ocasión también probamos algunos de los originales platos de Lusco Taberna, en la calle Nubla 33, un local muy coqueto con una decoración moderna y la cocina a la vista.
Comenzamos con unas Alcachofas confitadas en AOVE ahumado con cecina de ciervo, parmesano y puré de limón (14,50€).
También probamos unos Bastones de berenjenas fritos con salsa de queso y miel (12,50€) y un Arroz meloso de setas, trufa y queso parmesano (14,90€).
Taberna Lusco
Macorina
Por último hablaremos del Restaurante Macorina, en la Plaza de la Corredera 1, un moderno espacio gastronómico de cocina andaluza con aires asiáticos.
Disfrutamos de varios de sus platos atrevidos como el exquisito Chili Crab de nécoras (13,90€) y las Zamburiñas (13,50€) con un equilibrado contraste de sabores.
También probamos unos Chipirones con un toque asiático (17,50€) y unos Siu MAi de Rabo de toro (15,50€).
Macorina
AOVE de Cazorla
Y como estábamos en una comarca donde el aceite de oliva era muy importante no podíamos dejar Cazorla sin visitar una almazara. Existía la posibilidad de contratar una visita guiada a una almazara de Cazorla con una cata de AOVE y acompañados de un guía local. En nuestro caso, para rematar este recorrido gastronómico por Cazorla visitamos las nuevas instalaciones de la Cooperativa de Aceites Cazorla, situadas a la salida de la localidad en la Carretera Peal de Becerro, km 10,5.
Se podía realizar una visita guiada a la almazara y acceder a la tienda donde compramos una Lata de 5 litros de AOVE y una botella de 500 ml de AOVE gran selección ambos elaborados con aceituna picual. También adquirimos una lata de 1 litro de AOVE de aceituna royal, una variedad muy común en esta comarca de Jaén.
De esta forma finalizamos nuestra estancia en Cazorla, donde descubrimos algunas cosas interesantes que ver y donde comer, tanto de tapas por sus bares o probando diferentes platos en sus restaurantes. Seguramente que volveremos para seguir disfrutando de los muchos atractivos que esconde la Sierra de Cazorla.
